Voy al sur en sentido contrario
para no llegar a ti
porque temo amarte donde ya no te tengo,
porque sentir que tu nombre ya no se prenuncia
y tu ausencia se vuelve visible es saber que no llego.
(Ir en sentido contrario
es saberte inexistente.
Me detengo a medio tranvía
y reclamo a mi derecha y a mi izquierda
buscarte pudiendo tocar tu piel, tu risa.)
Voy en sentido contrario
por este miedo que puedo tener
al saberme desesperado de un amor que no es mío;
desesperado de desear tu boca, tus manos, tu piel, tu lujuria.
Miedo de encontrarme en una estación fantasma
donde ya no existe ni tu olor ni tus ganas.
Viajo en sentido contrario para olvidar cuántas veces
Te he buscado entre el olvido.
para no llegar a ti
porque temo amarte donde ya no te tengo,
porque sentir que tu nombre ya no se prenuncia
y tu ausencia se vuelve visible es saber que no llego.
(Ir en sentido contrario
es saberte inexistente.
Me detengo a medio tranvía
y reclamo a mi derecha y a mi izquierda
buscarte pudiendo tocar tu piel, tu risa.)
Voy en sentido contrario
por este miedo que puedo tener
al saberme desesperado de un amor que no es mío;
desesperado de desear tu boca, tus manos, tu piel, tu lujuria.
Miedo de encontrarme en una estación fantasma
donde ya no existe ni tu olor ni tus ganas.
Viajo en sentido contrario para olvidar cuántas veces
Te he buscado entre el olvido.